Verificar las medidas

• Asegúrate que las dimensiones de tu documento coincidan con las medidas requeridas y aprobadas previamente. Es fundamental confirmar que la orientación (vertical u horizontal) y el tamaño sean los correctos antes de proceder con la impresión.

Márgenes de 3 milímetros

• Además de los márgenes de diseño, deja un espacio adicional de 3 milímetros (margen de corte) alrededor de todo el documento. Este espacio es necesario para el proceso de corte o refile, evitando que se recorten partes importantes del diseño en la impresión final.

Trabaja los colores en CMYK

• Utiliza siempre la paleta de colores en modo CMYK (Cian, Magenta, Amarillo y Negro). Convierta tus imágenes de RGB a CMYK para garantizar que los colores se reproduzcan de manera fiel en la impresión. Los colores en RGB son ideales para pantallas, pero pueden diferir significativamente al ser impresos.

Convierte las fuentes a curvas

• Es esencial que todas las fuentes utilizadas en tu diseño estén convertidas a curvas o contornos. Esto incluye cualquier texto, incluso los bordes o detalles gráficos que contengan letras o tipografías. Así, te aseguras de que no haya problemas de compatibilidad si el impresor no tiene la misma fuente instalada.

Verifica la resolución de las imágenes

• La resolución de las imágenes debe estar entre 200 y 400 píxeles por pulgada (ppi). Las imágenes de baja resolución pueden aparecer pixeladas o borrosas al ser impresas, afectando la calidad final del producto.

Haz una copia de archivos enlazados

• Realiza una copia de todas las fuentes e imágenes que has utilizado en el diseño y asegúrate de enviarlas junto con el archivo final. Esto garantiza que el impresor pueda acceder a todos los elementos necesarios para reproducir tu diseño correctamente.

Informa los detalles de la impresión

• Detalla en tu diseño o en las instrucciones de impresión los aspectos específicos como pliegues, acabados especiales (brillantes, mate, texturizados, etc.), cortes, o cualquier detalle adicional relevante. Es importante ser claro para evitar malentendidos y asegurar que el resultado final sea el esperado.

Envía un montaje de tu diseño

• Siempre envía un montaje visual de cómo debe lucir el diseño impreso. Esto es especialmente importante en el caso de empaques y otros trabajos que requieran una orientación visual precisa. El montaje ayuda al impresor a tener una idea más clara de cómo debe ensamblarse el producto final.

Escribe la información importante

En el correo o la comunicación que envíes, incluye toda la información esencial, como:

• • Datos de contacto (nombre, teléfono, email).
  • Tipo de papel o material de impresión.
  • Cantidad de impresiones o copias requeridas.
  • Detalles adicionales sobre acabados, acabados especiales o instrucciones para la entrega.